Después de la ola de calor y sequía en enero, la pregunta es cómo se vieron afectados los cultivos y cuál es el grado de recuperación ante las nuevas lluvias.
La Ing. Agr. Leonor Blanco, del Departamento de Información Agronómica de la Bolsa de Cereales de Córdoba, comentó que aumentó un 25% el estado regular y malo de los cultivos, pero dijo también que “las lluvias de la segunda semana de febrero fueron un alivio para los cultivos”.