La batata es el quinto cultivo destinado a alimentación en el mundo. Es amigable con el ambiente, rústica y se lo considera un alimento saludable, casi perfecto, con efectos benéficos en la prevención de diferentes afecciones.
Posee, además, numerosas aplicaciones industriales, todo lo cual conlleva un incremento de la demanda mundial de esta hortaliza.
Lamentablemente, a nivel global, nacional y provincial tiene un grave limitante en la producción, que son las virosis. En el caso de Argentina, éstas fueron importantes en dos etapas anteriores, a partir de que se empezaron a estudiar, en Santiago del Estero y Córdoba (en la década del 70 y 90).
Luego, en 2009, nos encontramos con una nueva patología viral que fue descripta en IPAVE, denominada “encrespamiento amarillo”, ocasionada por siete agentes virales, lo que la hace muy grave (una de las más severas que existe en el mundo) y que se manifiesta, a diferencia de las dos anteriores, en todas las regiones productoras del país. Esto ha despertado la preocupación de todos los horticultores que se dedican a este cultivo. (Fuente: https://inta.gob.ar)
Conocemos la problemática virósica de la batata y la solución que encontraron los investigadores del INTA CIAP, para mejorar significativamente la sanidad, calidad y producción.