Los precios de los principales granos culminaron la semana al alza en el mercado de Chicago, lo que permitió al trigo consolidar la tendencia alcista y superar los US$ 300 la tonelada. Este es su valor más alto desde diciembre de 2012, mientras que la soja saltó US$ 8 y en los últimos cinco días acumuló una mejora de US$ 21,7 por tonelada para revertir una racha bajista.

De esta manera, el contrato de noviembre de la oleaginosa subió 1,79% durante la jornada y cerró a US$ 453,42 la tonelada, mientras que el trigo se ubicó en US$ 300,20 la tonelada, su cotización más alta en casi nueve años, indicó la corredora de granos Granar.

Por su parte, el precio maíz ganó 1,36% (US$ 3,05) y concluyó la sesión a US$ 227,25 la tonelada.

Dos factores marcaron el ritmo de las subas del trigo durante la semana, que concluyeron con mejoras del 6,59% y el 6,97% en las principales plazas referentes estadounidenses: la previsión del USDA de una mayor demanda y una menor producción y la incertidumbre respecto a las exportaciones rusas.

La dependencia norteamericana estimó en el reporte de noviembre un consumo global en 787,4 millones de toneladas, 300.000 toneladas más que en la estimación de octubre, cifra récord.

Esto se conjuga con una menor producción estimada a nivel mundial ahora en 775,3 millones de toneladas, “para redundar en una caída en los stocks globales del cereal por segunda campaña consecutiva”, explicó la BCR.

Así, las existencias globales de trigo a final de campaña se proyectan en 275,8 millones de toneladas, por debajo de las estimaciones de los operadores y el menor volumen desde el ciclo 2016/17.

Por otro lado, el mercado se encuentra expectante respecto a si Rusia, el principal exportador del mundo, podrá cumplir con el cupo de exportación de 31,5 millones de toneladas que finaliza en junio del año que viene, lo cual generaría mayor presión sobre la oferta.

Además, también hay incertidumbre ente los operadores acerca de si el gigante euroasiático modificará el esquema de retenciones.

Compartir