La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación informó que el Fondo para el Desarrollo del Enoturismo realiza una ejecución de $300 millones con el fin de contribuir al desarrollo y promoción del enoturismo en el país.
Esta iniciativa financiada por el Ministerio de Economía de la Nación, a través de la cartera agropecuaria, y articulada a través del Ministerio de Turismo de la Nación y la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), tiene el objetivo de fortalecer y diversificar la oferta turística enológica en Argentina, impulsando el crecimiento económico y la creación de empleo en las regiones vitivinícolas. A través de este programa, se brindaron apoyos y beneficios a las bodegas y fincas participantes, permitiéndoles mejorar su infraestructura turística y fortalecer sus capacidades en la gestión turística.
El Fondo para el Desarrollo del Enoturismo se lanzó con la firma del ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, del secretario de Agricultura de la Nación, Juan José Bahillo y del presidente de COVIAR, Mario González, el 26 de abril de este año. Los recursos del programa fueron aportados por la Secretaría de Agricultura a través de FONDAGRO cuyo administrador fiduciario es el Bice Fideicomiso.
Durante la primera etapa del programa se aprobaron 147 proyectos que recibirán en total $220 millones en 16 provincias, para invertir en infraestructura, bienes y servicios que les permitan potenciar sus servicios turísticos, además de mejoras significativas en sus instalaciones, incluyendo la creación o renovación de espacios de visita, áreas de degustación y otras actividades en bodegas. Estas mejoras permiten ofrecer experiencias enoturísticas de mayor calidad y comodidad para los visitantes.
Mientras que el componente 2 del programa permitió que bodegas y fincas participantes, tanto las abiertas al turismo como las que aún no lo están, recibieron capacitaciones especializadas en gestión turística, marketing digital, atención al visitante y desarrollo de productos enoturísticos.
Estas capacitaciones han permitido a las bodegas y fincas adquirir las habilidades y conocimientos necesarios para ofrecer experiencias de calidad y diseñar propuestas turísticas atractivas. Un total de 350 participaciones al curso de capacitación podrán acceder a presentar nuevos proyectos que aumenten la oferta enoturística de nuestro país.
El FDE tiene una fuerte impronta federal por lo que se benefició a bodegas y productores vitivinícolas de Jujuy, Salta, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Mendoza, San Luis, San Juan, Entre Ríos, Córdoba, Buenos Aires, La Pampa, Neuquén, Río Negro y Chubut.
El FDE busca generar herramientas para el fomento y desarrollo del sector en su conjunto y de los emprendimientos enoturísticos, actuales o por venir, que incentiven con sus acciones y actividades la optimización de recursos humanos, capacitaciones y soportes tecnológicos.
El desarrollo del turismo del vino también es uno de los ejes del Plan Estratégico Vitivinícola (PEVI) en su actualización al 2030. En la actualidad hay aproximadamente 380 bodegas abiertas al turismo, instaladas en 16 provincias del país, lo que muestra un crecimiento de la actividad en los últimos tres años, ya que en 2020 se contaban 14 provincias y 200 bodegas dedicadas al enoturismo.