La carne argentina: ¿cómo queda frente a la guerra de aranceles entre China y Estados Unidos?

Frigoríficos estadounidenses fueron sancionados por el gigante asiático, lo que genera oportunidades para el alimento argentino de más valor.

Por los próximos 90 días, a partir de la tregua en la guerra aranceles que el gobierno de Estados Unidos dispuso en comercio exterior a nivel global, sólo va a quedar circunscripta a esos dos países.

Es que el enfrentamiento entre ambas potencias va más allá de la implementación de tasas recíprocas, y también incluye sanciones a empresas.

El 6 de abril, China dejó afuera del registro de habilitación a mil compañías de todo tipo de carnes que habían ingresado a ese mercado luego del acuerdo en 2020. El impacto de la medida será significativo. Sucede que Estados Unidos es un jugador de peso en el mercado chino.

En 2024 fue el tercer exportador luego de Argentina y de Brasil con 590 mil toneladas. Representó un negocio de u$s 2.500 millones, el segundo en facturación dentro del ranking de proveedores chinos.

Luego de estas medidas, el precio de la carne en China subió 10%, lo que abre posibilidades para Argentina, en lo que son los cortes de alto valor.

Otro ojo en Estados Unidos

Mientras tanto, los frigoríficos nacionales también deberán seguir de cerca la evolución del mercado estadounidense. Todo a partir de las manifestaciones de su secretaría de Agricultura, Brooke Rollins, quien sostuvo que su país iba a priorizar su propia carne antes que la de argentina.

A partir de un acuerdo país-país, Argentina cuenta con una cuota anual de 20 mil toneladas de carne bovina deshuesada enfriada y congelada.

Entre enero y febrero, las operaciones se han realizado a buen ritmo, con embarques en ese período por 7.000 toneladas.

Desde la industria nacional se relativizaron los dichos de la funcionaria, al sostener que Estados Unidos necesita importar, de forma obligatoria, carne de otros destinos para seguir abasteciendo su demanda doméstica.

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