Las camas biológicas son una tecnología sustentable y biológicamente activa que retiene y degrada microbiológicamente, y de manera efectiva, los excedentes de productos fitosanitarios, tanto solos como en mezclas.
Estas evitan la contaminación puntual con estos productos, impidiendo que lleguen al suelo, a las napas y/o a los cursos de agua.
Son una solución práctica para el manejo de derrames y excedentes de mezcla sin aplicar y para enjuagar y lavar tanto los equipos de aspersión como los equipos de protección personal y otros implementos utilizados en la aplicación de fitosanitarios y forman parte, a su vez, de las medidas de mitigación de riesgos englobadas en las Buenas Prácticas Agrícolas.
La utilización de las camas biológicas se basa en el principio de la bioprofilaxis, que utiliza los procesos biológicos para evitar la contaminación. Hay otro enfoque basado en la actividad biológica que es el de biorremediación, que utiliza procesos biológicos para destruir o reducir la concentración de xenobióticos (fitosanitarios en este caso) en suelos que ya están contaminados, pero este último no es el enfoque que se persigue en los lineamentos del uso responsable de fitosanitarios.
Las camas biológicas llegan como una importante solución al tratamiento de los residuos de fitosanitarios y Campo Directo quiso conocer más.
FUENTE: Casafe