Los diezmados rendimientos en los principales cultivos de la campaña de soja 2022/23, invitan a los productores a rediseñar sus esquemas de negocios en el marco de la nueva siembra. Los datos se conocieron en las distintas ponencias de los técnicos de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA), en el marco reciente Encuentro de Vinculación.

“La campaña 2022/23, arrojó una caída en materia de rindes del 50 por ciento. En Córdoba los rindes promedios en soja, oscilan entre los 29 y 30 qq/ha. Sin embargo, la performance en este ciclo alcanzo los 15 qq/ha. Si bien, la superficie sembrada se mantiene en la provincia, la producción cayó un 60% respecto del histórico en la provincia. A nivel nacional, los valores producidos fueron bajos. Desde el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, informaron que la producción nacional de soja fue de 25 millones de toneladas. Córdoba, aporto el 20 por ciento de la producción global”, indicó el Ing. César Alonso.

La producción cayó por diversos factores. Las lluvias no

acompañaron en ninguno de los meses; siempre los valores estuvieron por debajo de los registros medios.

“Realizamos un análisis que determinó que, desde el mes de septiembre al mes de marzo de 2023 período en el que se cultiva la soja, tuvimos un déficit muy marcado de humedad. Recordemos que la cosecha recibió el impacto de nueve olas de calor y una helada a principios de febrero que fue la que terminó de liquidar el cultivo. Contra el clima no hay mucho que hacer. Sin embargo, Córdoba se adapta modificando la fecha de siembra. El 70 por ciento de los cultivos se siembra de forma tardía después de la primera quincena de noviembre. Pero sin dudas, fue la peor campaña en soja de la década”, dijo Alonso.

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